Delitos informáticos: los más comunes
Día con día estamos expuestos a los delitos informáticos y no nos damos cuenta. A continuación te decimos cuáles son los más comunes. ¡Te sorprenderás!
En la actualidad nos encontramos muy vulnerables frente a los avances tecnológicos que, cada vez más, nos sorprenden con su vertiginoso desarrollo. Existen ciertos grupos de personas que se dedican a cometer delitos en la red de los que casi no nos damos cuenta. De acuerdo con el experto Hiram Raúl Piña (Universidad Autónoma del Estado de México), entre los más comunes están:
El hackeo o hacking. En términos simples, es una práctica que permite a una persona externa y con grandes conocimientos del sistema informático, acceder a los datos de las computadoras de un particular, o bien, de una empresa. Es delito informático cuando esta acción se ejecuta con un fin particular, por ejemplo, robar información confidencial, datos o incluso trasgredir los derechos intelectuales.
El cracking. Este sujeto no conoce a fondo el sistema que va a vulnerar, su único fin es el de "piratear" el software. Digamos que es la versión amateur del hacker.
Uno de los más comunes y peligrosos para nosotros como usuarios que navegamos por la red desde nuestra casa es el pishing. Alguna vez hemos recibido un correo electrónico "supuestamente" de un banco, o de cualquier institución que maneje nuestros datos personales, donde nos piden actualizar nuestra información. Las personas que se dedican a esto crean cuentas falsas, pero muy realistas, para robar nuestras claves bancarias o cualquier tipo de dato confidencial. Debemos tener en cuenta que ninguna empresa seria pide información privada por este medio, siempre la solicita personalmente.
Debemos tener cuidado al conectarnos a las señales de Wi-Fi de cualquier lugar público o podemos caer en las manos de las señales evil twins. Las personas que realizan estos actos, crean una red alternativa con el mismo nombre de la red Wi-Fi de lugares públicos como: cafeterías, bares, u otros, para que, al conectarnos, se adueñen de todos los datos que ingresemos en el momento de nuestra navegación por internet, tales como: contraseñas, direcciones, datos bancarios, en fin, cualquier otro que consultemos en ese espacio de tiempo.
Algo menos dañino pero muy molesto es el spam o correo no deseado, que las compañías nos envían por toneladas únicamente con fines comerciales.
Finalmente mencionaremos en robo de identidad. Ésta comprometida práctica tiene distintos niveles de peligro. En el que llamaremos primer nivel, alguien puede robarnos nuestras fotografías, nombre y datos para crearse un perfil falso en una red social para conocer gente. Ya en niveles más avanzados, algunos individuos se adueñan de las identidades de personas que dan servicios a la comunidad y que son conocidos y, en su nombre, piden dinero a gente indefensa que confían en ellos.
Si alguna vez has sido víctima de uno de éstos delitos, tenemos profesionales en derecho informático que te pueden ayudar. No dudes en consultarles cualquier duda.
