La controversia de la adopción para matrimonios gay

La adopción por si sola siempre ha sido un tema generador de polémica puesto que a nivel social hay diferentes puntos de vista en cuanto a que los padres pueden no prestarle la atención requerida a los niños, que no se sabe realmente como eran los padres biológicos de estos niños, entre otro número de argumentos ciertos o falsos. Lo que es una realidad es que desde 1932 la adopción de matrimonios heterosexuales se ha podido llevar a cabo sin problemas cumpliendo con los requisitos necesarios solicitados a nivel gubernamental.

En la actualidad ha habido una revolución social, una mayor expresión individual en todos los sentidos, somos una sociedad con la mente más abierta y por tanto con una creciente libertad de actuar, hablar y defender lo que realmente creemos, sentimos y pensamos. Por esto es que las parejas homosexuales deciden unir su amor a través de la institución social llamada matrimonio como lo hace cualquier pareja que se ama, sin embargo como es bien sabido una de las principales características del matrimonio es que dicha unión se hace con la finalidad de formar una familia, es por tanto que las personas del mismo sexo exigen igualdad ante el tema y exponen su inquietud por tener el derecho de adopción.

Existe una gran controversia por parte de los que consideran que las personas del mismo sexo tienen los mismos derechos de formar una familia y por otro lado se encuentra la iglesia y las personas que están en contra pues consideran que la naturaleza de un matrimonio es que esté conformado por un hombre y una mujer.

La situación actual frente a este tema en nuestro país es que el 16 de agosto de 2010 la Suprema Corte de Justicia de la nación aprobó este dictamen a cargo del Ministro Sergio Armando Valls; 9 de 11 ministros en el Distrito Federal votaron a favor para que parejas gay puedan adoptar menores, donde los argumentos fueron que no se puede dar por hecho que los niños criados por parejas del mismo sexo en un futuro sufrirán discriminación, además porque estas familias ya existen, por tanto no se puede prohibir de este derecho a unidades homoparentales.

Se estima que la comunidad gay en México es de poco menos del 10%, lo cual representa una gran parte de la población y es por ello que se toma en consideración este tipo de peticiones e inquietudes. Por el momento solo se encuentra aprobada y legalizada en el Código Civil de la Ciudad de México y ahora en el estado de Coahuila, seguramente será un proceso que vaya con lentitud en todo el país, pero lo que bien es cierto es que México sigue siendo una nación arraigada a sus costumbres, a la iglesia y que gran parte de la población es conservadora, este tema implica un fuerte cambio social, sin embargo la tendencia mundial apunta a que sea una ley aprobada a nivel nacional.